Dos agujas, eso es todo lo que ocupa y necesita este minimalista reloj analógico y digital para mostrarnos el paso del tiempo y convertirse en el punto focal de cualquier pared. En los extremos de sus agujas, dispone de unos LEDs que proyectan las horas y los minutos exactos que marcan sus manecillas. Cuando ambas están en línea, el tiempo es reflejado solamente en la manecilla de los minutos para evitar la mezcla de los indicadores de tiempo.