Para tener uno de estos sables láser en tus manos no necesitas ser un Jedi o un Sith, ni siquiera un Padawan. Tampoco se necesitan largos años de entrenamiento para saber utilizarlos. Todo lo que hay que hacer es verter el zumo (o cualquier bebida sabrosa a tu elección) en el interior del molde y luego insertar las cuatro empuñaduras de sable de luz. Cada una de ellas tiene una bombilla LED oculta en el interior que se encargará de iluminar el hielo para hacer más geek la experiencia de comer un helado.
No temas a ser destinado a un inhóspito y caluroso planeta con tres soles, un valeroso soldado imperial con su armadura blanca aguanta lo que le echen, y con un kit para hacer helados como este, mucho más.
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